- Proyecto es liderado por la Asociación de Productores Agrolajas, con el apoyo del Inder, universidades públicas, cooperación internacional, organizaciones no gubernamentales y aportes privados.
- La fruta se utiliza en su totalidad y tiene una variedad de usos como la alimentación humana, cosmética y hasta para alimentar ganado.
- Inder se encargó de adquirir la maquinaria especializada para el procesamiento de la fruta y otras inversiones relacionadas por ₡25.8 millones.
- “Luego de muchos años de esfuerzo y dedicación, logramos levantar la primera planta de procesamiento de coyol de Costa Rica y América. Estamos generando nuevas oportunidades a los productores de la zona y reactivando la economía local”, indicó Gerardo Cascante, presidente de Agrolajas.
Abangares, Guanacaste. El servicio de noticias internacional BBC llamó al coyol “el nuevo oro verde”, por sus características y utilidades para la alimentación humana, cosmética y hasta el alimento para ganado. El fruto es utilizado prácticamente en su totalidad.
Aquí en Costa Rica, la Asociación Agropecuaria de Lajas, en Abangares, Guanacaste, lidera un ambicioso proyecto de Procesamiento y Comercialización de la Palmera de Coyol (Acrocomia spp) que incluye la construcción una planta y equipo especializado para su producción con apoyo de instituciones como el Instituto de Desarrollo Rural (Inder), agencias de cooperación internacional, organizaciones no gubernamentales, sector privado y universidades públicas.
“Luego de muchos años de esfuerzo y dedicación, logramos levantar la primera planta de procesamiento de coyol de Costa Rica y América. Con esta iniciativa, unas 75 familias generan nuevos ingresos por la venta de la fruta y un total de 100 familias tienen siembras propias de coyol. Estamos generando nuevas oportunidades a los productores de la zona y reactivando la economía local”, indicó Gerardo Cascante, presidente de Agrolajas.
El proyecto establece la siembra de entre 150 y 160 hectáreas de cultivo de coyol, es decir, unas 75 mil plantas en tierras de pequeños productores asociados. Con estas plantaciones se establece un nuevo uso agrícola a largo plazo que permite generar ingresos sostenibles para las familias.
De la fruta se obtienen cuatro diferentes productos incluyendo aceite vegetal de la semilla, así como torta o expeller de la semilla; también pulpa de la cascarilla del coyol y “carozo” que es la cáscara dura del conocido “coquito” de la fruta. Esos productos se utilizan para la producción de aceite vegetal y como alimento para ganado.
“Desde el Instituto de Desarrollo Rural (Inder) apoyamos esta iniciativa mediante la dotación de la maquinaria especializada para procesar la fruta del coyol incluyendo una máquina conocida como ‘quebradora de endiocarpio’, una separadora gravimétrica, un calentador de semillas, un filtro para aceite y un panel eléctrico entre otros”, puntualizó el presidente ejecutivo, durante una visita al proyecto que beneficiará a los productores del Territorio Rural de Abangares-Bagaces-Cañas-Tilarán.
Las inversiones del Inder en este proyecto fueron de ₡22,6 millones en el equipamiento, así como otros ₡3.1 millones en materiales de empaque para los productos con valor agregado ya terminados incluyendo sacos y envases, para un total de ₡25.8 millones. El proyecto incluye apoyo técnico especializado de la Universidad de Costa Rica (UCR), el Tecnológico de Costa Rica (TEC), Universidad Estatal a Distancia (UNED). Adicionalmente hay aportes económicos de organizaciones como BMZ (Ministerio Alemán de Cooperación Internacional y Desarrollo); Fundación Banco Ambiental (FUNBAM), Fundación Costa Rica Estados Unidos para la Cooperación (CRUSA), de la ONG ILD, así como aportes privados. La inversión total es de ₡269 millones.