Otras 50 familias de las Barras del Caribe tendrán viviendas adaptadas a su clima y necesidades

  • BANHVI aprobó ¢892 millones para segunda etapa del proyecto de vivienda en este sector.
  • Casas, construidas con maderas tratadas, estarán distribuidas en Parismina, Pacuare y La Lucha (Siquirres), así como en Tortuguero, San Francisco, Colorado Norte y Sur (Pococí).
  • Primera etapa se entregó en 2021 y comprendió 69 casas en las cuales el BANHVI invirtió ¢1.049 millones.

Casas frescas, levantadas sobre pilotes y construidas con maderas tratadas serán las que reciban 50 familias limonenses, al aprobar el Banco Hipotecario de la Vivienda (BANHVI) la segunda etapa del proyecto de las Barras del Caribe Norte del país, en las cuales se invertirán ¢892 millones de recursos del bono provenientes del Fondo de Desarrollo de Asignaciones Familiares.

La iniciativa -que en una primera etapa benefició a 69 familias- es producto del trabajo coordinado entre el MIVAH, BANHVI, JAPDEVA y SINAC. En su totalidad, cubrirá a unas 200 familias residentes en diversas localidades ubicadas en las márgenes de los distintos canales del Caribe Norte de la provincia de Limón.

Las viviendas de esta segunda etapa estarán destinadas a 50 familias de siete comunidades: Pacuare (2), Parismina (2), La Lucha (5), del cantón de Siquirres; así como en Barra del Colorado Sur (7 casas), Colorado Norte (16 casas), y San Francisco (12), y Tortuguero (6), en el cantón de Pococí.

Un total de 45 casas tendrán dos dormitorios, y las 5 restantes contarán con tres dormitorios, por tratarse de familias numerosas. El traslado de los materiales es por medio de camiones, en botes por los canales de la zona y finalmentecarretillas hasta el terreno de las familias.

La ministra de Vivienda y Asentamientos Humanos, Irene Campos Gómez, indicó este ha sido un claro ejemplo del trabajo coordinado y la suma de voluntades para lograr que decenas de familias limonenses accedan al bono de vivienda.

“El MIVAH, BANHVI, JAPDEVA y SINAC hemos sido las instituciones del estado involucradas, además de la entidad autorizada y la empresa constructora. Esto nos permite llevar tranquilidad, seguridad y techo seguro a familias que por años han esperado contar con una casa en toda esta zona de Las Barras del Caribe”, mencionó la jerarca.

En tanto, el segundo vicepresidente de la República, Marvin Rodríguez, expresó que “desde

la gestión territorial de la estrategia Mesa Caribe nos complace poder materializar este tipo de esfuerzos que indudablemente contribuyen a la construcción de bienestar para estas 50 familias que tendrán la posibilidad de contar con una vivienda digna, adaptada a las condiciones climáticas de la región Caribe, llevándoles tranquilidad y seguridad”.

Para Claudia Dobles, Primera Dama de la República, la conclusión el año anterior de la primera etapa con 69 casas y la aprobación de recursos para esta segunda fase en beneficio de 50 familias, es motivo de alegría. “Nos complace especialmente que estas viviendas se hayan diseñado con madera y hayan sido levantadas sobre pilotes para ofrecer durabilidad y tranquilidad ante las condiciones climáticas de la región», enfatizó.

Casas adaptadas a la zona. En 2021, el BANHVI dotó de casa nueva a 69 familias de las Barras del Caribe. Las casas -todas ya habitadas- se encuentran en las comunidades de San Francisco (12) y Tortuguero (15), en el cantón de Pococí; y Parismina (19) y La Lucha (23) en el cantón de Siquirres. La inversión del BANHVI fue por ¢1.049 millones.

El diseño y materiales seleccionados permiten garantizar durabilidad y dar tranquilidad a las familias ante las condiciones climáticas de la región. Al estar levantadas sobre pilotes, pueden hacerle frente a las “llenas” (inundaciones pasivas, propias del lugar).

El gerente general del BANHVI, Dagoberto Hidalgo, resaltó la calidad de los materiales y el diseño, ya que responden a la topografía de los terrenos y clima propios de la zona, así como a la arquitectura autóctona del Caribe costarricense. “Son en madera en todos sus elementos estructurales y levantadas sobre pilotes para salvaguardar la integridad de las familias y proteger sus pertenencias, por el impacto de las “llenas”, dijo.

Las maderas usadas tienen un tratamiento especial para garantizar una prolongada vida útil de las viviendas, ante las inclemencias del clima, como humedad, inundaciones y brisa marina.

Hidalgo mencionó la importancia del proyecto en la reactivación económica de la región, al generar unos 170 empleos directos e indirectos, así como otros encadenamientos productivos como venta de materiales de construcción, alimentación y actividad de consultoría.

Permiso de uso de suelo. Las familias tienen más de 20 años de vivir en dichas comunidades y recibieron un permiso de uso de suelo de la Junta de Administración Portuaria y de Desarrollo Económico de la Vertiente Atlántica (JAPDEVA), para optar por un bono de vivienda, con el cual construir sus casas.

Andrea Centeno, presidenta ejecutiva de JAPDEVA, comentó que “las familias con la oportunidad de tener vivienda digna y adaptada a las condiciones climatológicas básicamente tendrán un cambio en su calidad de vida, al tiempo que se mejora el desarrollo integral de sus comunidades y se previenen situaciones de afectación ante fenómenos del clima que suceden en estas zonas tan sensibles”.

La construcción estará a cargo de la Sociedad Maderera de Barrio Cuba S.A (Somabacu) y la supervisión de los trabajos y fiscalización de los recursos del bono será responsabilidad de la Fundación Costa Rica Canadá.