- Así lo expresó el presidente Alvarado en Consejo de Gobierno ampliado en Puntarenas, tras reafirmar su compromiso de preservar la estabilidad de Costa Rica y de impedir que el país caiga en una crisis que afectaría severamente a todos, en particular a los más pobres.
- El mandatario reiteró que deben ser los más pudientes los que paguen los impuestos para sanear las finanzas públicas y poder seguir construyendo infraestructura y obra social.
- Alvarado aseguró que en la mesa de negociación con el FMI, el gobierno no ha contemplado la venta de empresas que son patrimonio del país como el ICE o los bancos.
- “No hay una salida sencilla ni de la pandemia, ni de la crisis económica, no la hay”, reconoció, reafirmando su compromiso de continuar haciendo lo correcto por sacar el país adelante, aunque esto genere el rechazo de algunos sectores.
El Roble, Puntarenas. Tras reiterar su compromisode preservar la estabilidad económica y social de Costa Rica, el presidente de la República, Carlos Alvarado, hizo un llamado a la ciudadanía a trabajar juntos por soluciones que permitan prevenir una severa crisis, que paralizaría la economía y la inversión pública en infraestructura y obra social y afectaría a toda la población, en particular a los más vulnerables.
Las declaraciones las dio durante el Consejo de Gobierno ampliado, realizado de forma virtual este miércoles en la sede de la Universidad Técnica Nacional (UTN), en El Roble de Puntarenas –en estricto apego a las medidas sanitarias–. En la sesión, Alvarado estuvo acompañado presencialmente por la Primera Dama de la República, Claudia Dobles; el vicepresidente del Instituto Costarricense de Puertos del Pacífico (INCOP), Gerardo Medina; diputados y diputadas de la provincia y representantes del gobierno local encabezados por su alcalde,
La exposición del mandatario se enfocó en resaltar la trascendencia para el futuro del país de las negociaciones que lleva adelante el gobierno para lograr un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que permita la estabilidad fiscal y generar las condiciones para la reactivación de la economía nacional, severamente golpeada por el impacto de la pandemia.
“Tenemos que actuar pronto, y aún estamos a tiempo para evitar una crisis”, aseguró, al tiempo que reconoció la compleja disyuntiva que enfrenta el país. “Si tenemos mascarilla es porque hay una pandemia que afecta gravemente nuestra salud, pero también a nuestra economía”, dijo.
El jefe del Ejecutivo destacó que países como Chile, Colombia o Alemania tienen margen fiscal para prolongar sus beneficios a las empresas y a las personas, contrario a Costa Rica que no tiene ese margen de acción.
En ese sentido, fue enfático en que de no conseguir nuevos recursos no se podrá continuar con la obra pública que se construye en materia social e infraestructura, haciendo referencia a obras particulares en la provincia como la ampliación de La Angostura, proyectos de vivienda o la construcción del nuevo hospital de Puntarenas.
“Porque para esos puentes, para esos atracaderos, para esos caminos, para esas escuelas”, se requieren los recursos que hoy no disponemos, en gran parte por el impacto de la pandemia.
“No hay una salida sencilla ni de la pandemia, ni a la crisis económica, no la hay”, dijo el presidente tras hacer un llamado al país a estar unidos.
En esta coyuntura, el presidente Alvarado hizo referencia también a los esfuerzos que ha hecho el gobierno en contención del gasto. “Hemos recortado 318 mil millones de colones, –eso es la mitad de FODESAF–, que estaban presupuestados para hacer esas carreteras, esos puentes, esas escuelas, para mantener esos servicios básicos”.
De seguido, manifestó su oposición a vender el patrimonio institucional de Costa Rica. “Por eso no hemos puesto sobre la mesa de negociación ni al ICE, ni a los bancos”, dijo, aseverando que “yo no voy a vender ese patrimonio”. Pero de inmediato se preguntó: “Si no vamos a vender ese patrimonio y no vamos a subir impuestos, ¿qué vamos a hacer?, ¿Vamos a despedir gente del sector público? ¿Tenemos los votos para hacerlo?”, expresó, dirigiéndose a los diputados ahí presentes.
Alvarado coincidió con los congresistas en que deben ser los más pudientes los que deben pagar en términos de impuestos. “No toca a los más pobres, no toca salarios del 70% de la población y les devuelve la transacción del IVA a la canasta básica. Toca a quienes tienen salarios superiores, a las empresas, a las grandes transacciones”, explicó.
Al hacer referencia a las manifestaciones protagonizadas este miércoles en diferentes partes del país, el mandatario dijo que, “a veces hacer lo correcto no es lo más aplaudido”, reconociendo que hay descontento generado en buena parte por el impacto de la pandemia y particularmente por el alto desempleo.
Al final, hizo una exhortación a sacar este maravilloso país adelante, trabajando en conjunto, acotando que “no es casual como lo dijo doña Claudia que revistas y periodistas extranjeros estén fijándose en la Isla San Lucas. No es casual, es porque es Costa Rica, porque nuestro país es diferente y debemos creer en nosotros mismos”, concluyó el presidente Alvarado.