- Plan piloto se desarrolla desde junio pasado en Isla Venado con el apoyo del Concejo Municipal del Distrito de Lepanto y la empresa privada.
- Participan 65 familias que producen sus propias hortalizas para autoabastecimiento y atender demanda de turistas.
- Proyecto incluye la construcción de 5 módulos de producción, tres parcelas demostrativas, donación de animales avícolas, de semillas, insumos y fertilizantes, entre otros aportes.
- “Yo insto a todos los pueblos de la Península con tierra para cultivar que lo hagamos, que sembremos para nuestras familias”, dijo una de las productoras beneficiadas de esta iniciativa que se proyecta ampliar a otros territorios costeros del Pacífico.
Golfo de Nicoya. Unas 65 familias de isla Venado cuentan con una alternativa de producción y de autoconsumo, gracias a una iniciativa de agricultura comunitaria que impulsa desde junio anterior el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), con el apoyo del Concejo Municipal de Distrito de Lepanto y de empresas privadas.
Las familias beneficiadas forman parte de la Cooperativa de Autogestión de Servicios de Acuicultura, Pesca y Turismo R. L. (COOPECUICULTORES R.L.), aunque a mediano plazo el objetivo es lograr involucrar a las 300 familias que habitan en la isla.
La primera etapa del proyecto inició en junio –en medio de la pandemia–, con la construcción de cinco módulos productivos para el cultivo de hortalizas, cucurbitáceas (ayote, melón y sandía), yuca, plátano y papaya, los cuales son atendidos mayoritariamente por mujeres.
La semilla fue donada por la empresa Eurosemillas y los insumos y fertilizantes fueron aportados por Coopeforjadores R.L., organización de Paquera que, con apoyo del Instituto Nacional de Innovación y Transferencia de Tecnología (INTA), desarrolló tres parcelas demostrativas. Además, las familias reciben asistencia técnica.
La producción de estos módulos se distribuye entre las familias para su autoconsumo. El resto es para abastecer la demanda de turistas de estos productos hortícolas y frutícolas, que se incrementará cuando pasen las restricciones impuestas por la pandemia.
Como fase complementaria, el pasado 5 de agosto, se entregó una donación de 300 pollitas por parte de la Granja Roble Alto, gracias a una gestión del MAG, por medio de la Cámara Nacional de Avicultores (CANAVI). Con ello, se procura que los habitantes de isla Venado puedan contar con huevos y carne para fortalecer el consumo de proteína en su dieta.
El ministro de Agricultura y Ganadería, Renato Alvarado, detalló que se espera en el corto plazo que, una vez comprobados los resultados de este proyecto piloto, ampliar el impacto del proyecto de agricultura comunitaria a otras familias de la isla y replicarlo en otros territorios costeros del Pacífico, como isla Caballo.
Por su parte, Jeaneth Rodríguez Villegas, una de las mujeres que trabaja en los módulos hortícolas indicó que su objetivo es producir alimentos frescos, inocuos, de excelente calidad para el autoconsumo y para atender la demanda de alimentación de los visitantes cuando éstos regresen.
“Este proyecto consiste en sembrar, cultivar, para autoconsumo, primero, y después, si podemos, vender para los gastos que tenemos. Es una alegría, un orgullo para nosotros, saber que la mayoría de los vecinos de la isla consuman lo que producimos. Gracias al Ministerio de Agricultura y Coopeforjadores que nos apoyó para capacitarnos, cómo sembrar, cómo abonar, cómo ver si están enfermas”, dijo.
Rodríguez instó a todos los pueblos de la Península, “donde tenemos tierra para cultivar, que lo hagamos, que sembremos para nuestras familias”.
Por medio de la cooperativa, en la isla desarrollan también un proyecto de maricultura, para el cultivo del camarón, con apoyo del Ministerio de Trabajo, el Parque Marino del Pacífico y el Incopesca, como una forma innovadora y sostenible para sacar adelante a las familias de la isla.