- 79% de las acciones estipuladas en la primera parte del Plan de Descarbonización (2018-2022) dieron inicio gracias al esfuerzo conjunto del sector público, sociedad civil, empresa privada y cooperación internacional.
- Avances en movilidad eléctrica cero emisiones, crecimiento de la red nacional de carga, Tren Eléctrico y Tren de Carga y proceso de compra de buses eléctricos.
- Plan Nacional para la Gestión Integral de Residuos, aplicación de medidas del sector industrial para reducir emisiones y diseño de un mecanismo para el acceso de Costa Rica a mejores mercados con certificaciones verdes, entre otros resultados.
- Descarbonización representará importantes beneficios para la economía y la calidad de vida de las personas.
Cuatro de cada cinco metas del Plan Nacional de Descarbonización se puso en marcha en su primer año de implementación, como parte de un esfuerzo del sector público, sociedad civil y sector privado por empezar la transición hacia una economía limpia, moderna y resiliente.
El 79% de las metas de la primera etapa del Plan (que va de 2018 a 2022) y el 82% de las acciones del Plan de Acción reportaron avances a febrero de 2020, cuando se cumple un año del lanzamiento del plan, según el informe Avances 2019 en el Plan Nacional de Descarbonización elaborado por la Dirección de Cambio Climático.
El reporte se nutre de 35 organizaciones —entre entidades públicas, empresas privadas y cooperación internacional— que fueron consultadas y reportaron sus avances de actividades por medio de una ficha de captura de datos.
“El avance de Plan es fruto del esfuerzo colaborativo. El cambio climático es un problema que excede al ambiente y que compete a todos los sectores de la economía. Por eso es crucial el trabajo con autobuseros, cooperativas agrícolas, municipalidades y ciudadanos con el plan”, destacó el ministro de Ambiente y Energía, Carlos Manuel Rodríguez.
A continuación, algunas de las principales acciones que fueron presentadas este lunes desde los 10 ejes del Plan, por la Primera Dama, Claudia Dobles, y el ministro Rodríguez:
Eje 1: Movilidad sostenible y transporte público
- Tren eléctrico: se completó el 100% en los estudios de factibilidad por parte del INCOFER.
- Buses eléctricos: comienzo de la implementación del proyecto piloto, avanzado proceso de compra.
- Sectorización: iniciada la intervención de carriles exclusivos en tres troncales.
Eje 2: Transporte liviano nutrido de energía renovable
- Publicación del Plan Nacional de Transporte Eléctrico con normativa complementaria que habilita su funcionamiento: 1) reglamento de la Ley, 2) reglamento de centros de recarga, 3) reglamento de repuestos para transporte eléctrico, 4) decreto para exoneración de vehículos eléctricos usados y 5) directriz para el recambio de flotas institucionales.
- Vehículos cero emisiones: 19 instituciones iniciaron transformación de flota (el ICE compró 100 automóviles; otras 18 instituciones suman en conjunto otros 109 vehículos).
- Centros de recarga: el ICE instaló 11 centros de recarga rápida y 34 semi-rápida. Así, el país cuenta ahora con más de 100 centros.
Eje 3: Transporte de carga eficiente
- Inicio del proceso de los estudios de factibilidad para el Tren Eléctrico Limonense de Carga (TELCA) y se cuenta con un primer piloto de logística, como parte de una alianza entre dos empresas del sector privado.
Eje 4: Energía eléctrica renovable a costo competitivo
- Instalación de más de 124.800 medidores inteligentes.
- 2.154 estudiantes y 489 docentes capacitados por el INA en el uso sostenible de la energía.
- Generación eléctrica con energías renovables en 2019 alcanzó el 99,15%.
Eje 5: Edificaciones sostenibles y de bajas emisiones
- Ministerio de Vivienda inició los procesos de definición de estándares de construcción sostenible para viviendas de interés social.
- 150 organizaciones implementan acciones de reducción de emisiones en infraestructuras existentes. 3 proyectos constructivos se implementaron bajo la categoría de diseño y construcción sostenible del Programa de Bandera Azul Ecológica.
Eje 6: Sector industrial de bajas emisiones
- Uso de refrigerantes: 2 proyectos piloto de sustitución a refrigerantes naturales en la industria de manufactura de alimentos (proyecto FIFCO-MINAE-PNUD).
- Con apoyo de GIZ, DIGECA implementó un Proyecto Piloto de Sustitución de 100 unidades de aires.
- Estudio de gasto tributario verde y diseño de un mecanismo para certificar como carbono neutral a productos específicos, empezando con un piloto en frutas, dispositivos médicos y servicios de alojamiento turístico. De este modo, el sector privado podrá ganar acceso a mejores mercados con certificaciones verdes.
Eje 7: Gestión integral de residuos
- Creación del Plan de Acción para la Gestión Integral de Residuos y el Plan Nacional de Compostaje.
- Inicio del proceso de construcción de la ley de economía circular.
Eje 8: Sistemas agroalimentarios bajos en carbono
- Arranque de proceso de construcción de nuevos planes para reducir emisiones, mejorar desempeño e incrementar eficiencia (plan NAMA) para los sectores de la caña de azúcar y del banano.
- Conclusión de la segunda etapa del escalamiento del NAMA en el sector cafetalero: 7.535 productores y productoras aplican nuevas tecnologías en 24.770 hectáreas.
Eje 9: Modelo ganadero bajo en emisiones
- A enero 2020, 750 fincas implementan al menos una de las tecnologías NAMA-Ganadería.
- Proyecto piloto de economía circular con la utilización de Residuos Agropecuarios Orgánicos en industrias ganaderas.
Eje 10: Gestión de territorios: rurales urbanos y costeros para la protección de la biodiversidad
- Puesta en operación de sistema de alerta temprana de incendios forestales: se controlaron y manejaron efectivamente 186 incendios forestales.
- Inicia reforestación de 3.5 km en el río Torres, de 3.6 km en Quebrada Los Negritos, y el proceso de restauración de 425 hectáreas en el Corredor Biológico María Aguilar.
Los estudios científicos son contundentes en señalar que el modelo económico actual, basado en la quema de combustibles fósiles (que emiten gran cantidad de dióxido de carbono y otros gases contaminantes) es insostenible y tiene efectos concretos en la economía y en las poblaciones.
En Costa Rica, el congestionamiento vial le cuesta al país hasta un 3,8% del PIB (Estado de la Nación, 2018) y la contaminación del aire significa para los hospitales nacionales un costo de $17 millones al año sólo en la atención de bronquitis (CATIE, 2017). Peor aún, el daño al medio ambiente potencia la muerte de 1.000 niños costarricenses cada año (OMS, 2017).
El Plan Nacional de Descarbonización busca contrarrestar situaciones como éstas, al proponer acciones planificadas y sistematizadas para que Costa Rica se inserte en el nuevo paradigma económico mundial: sostenible y basado en energías limpias.