“Costa Rica es un país pequeño en territorio pero grande en compromiso con el futuro ambiental del planeta”

  • Así lo declaró el Presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado, ante la Cumbre de Acción Climática, inaugurada este lunes en la sede de la ONU.
    • “Acciones y no discursos es lo que nuestro país aporta a este proceso global para enfrentar los estragos del cambio climático”, aseguró, recordando el Plan de Descarbonización que establece la meta de cero emisiones netas en el 2050.
    • Mencionó también la extensión de la moratoria de exploración y explotación petrolera al 2050 y el establecimiento de normativa para implementar la Ley de Incentivos a la Movilidad Eléctrica, entre otras acciones.
    • “Si la casa está en llamas, el temor no debe paralizarnos, sino inspirarnos para impulsar un cambio transformacional, con crecimiento económico y mejora de la calidad de vida”, exhortó en el mensaje a la comunidad internacional.

    En el inicio este lunes de la Cumbre de Acción Climática de las Naciones Unidas, el Presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado, exhortó a la comunidad internacional al cambio transformacional que requiere el mundo y a avanzar juntos, sin temor, con acciones concretas para alcanzar lo que parece imposible.

    Tras reafirmar el compromiso de Costa Rica con el futuro ambiental del planeta, comentó que “si la casa está en llamas, el temor no debe paralizarnos, sino inspirarnos a impulsar un cambio en la transformación de la economía para enfrentar los estragos provocados por el cambio climático”.

    La cita mundial reúne a lo largo de esta semana a líderes de gobierno, sector privado, sociedad civil, autoridades locales y organizaciones internacionales para desarrollar soluciones ambiciosas a fin de combatir el cambio climático, en respuesta al llamado del Secretario General de la ONU, António Guterres, quien pidió planes concretos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero a un 45 % en los próximos diez años y a cero para 2050.

    En sintonía con el pedido urgente de Guterres, el presidente Alvarado inició su intervención con el ejemplo de Costa Rica de haber hecho posible sostener su economía con electricidad 100% renovable, haber detenido y revertido el índice de deforestación más alto del mundo y lograr crecimiento y bienestar económico al mismo tiempo que se invierte en naturaleza.

    “Vivimos tiempos complejos. Estamos en un punto de inflexión marcado por la ciencia que nos recalca que se nos agota el tiempo para solventar la crisis climática y sus efectos sobre la supervivencia de las especies. Hoy los jóvenes nos reclaman acciones urgentes para acelerar la transformación de nuestras economías hacia la descarbonización y para aminorar la escala de afectación de las poblaciones más vulnerables, expresó.

    Dirigiéndose al Secretario General de la ONU, comentó que “usted nos pidió venir a Nueva York con acciones y no con discursos, y es lo que este pequeño país en territorio, pero grande en compromiso y convicción aporta a este proceso global”.

    El jefe de Estado de Costa Rica enumeró ante los líderes de todo el planeta las acciones de la actual administración para revertir los efectos del cambio climático, destacando que es el principal reto que le tocó enfrentar a su generación.

    “Hemos oficializado el Plan de Descarbonización, nuestra estrategia de largo plazo que establece una meta para ser emisiones netas cero en el 2050 y estamos realizando una serie de acciones complementarias en diversos ámbitos para facilitar su implementación”, indicó, puntualizando que las metas del Plan de Descarbonización fueron incorporadas al Plan Nacional de Desarrollo, se extendió la moratoria de exploración y explotación petrolera al 2050 y se estableció normativa para implementar la Ley de Incentivos a la Movilidad Eléctrica.

    Se refirió a la inversión del país de 30 millones de dólares anuales derivados del impuesto a los combustibles fósiles en soluciones basadas en naturaleza y de más de 5.000 millones de dólares en infraestructura para garantizar energía renovable. Asimismo, al desarrollo de infraestructura de recarga en todo el el territorio nacional y al compromiso de alcanzar un 60% de cobertura forestal en el 2030 y a que el 30% del transporte público sea cero emisiones en el 2035.

    La Cumbre de Naciones Unidas fue convocada ante los impactos que el cambio climático están teniendo en la vida de las personas. Las economías nacionales se están viendo afectadas, debido a que las emisiones de carbono a nivel mundial están alcanzando niveles sin precedentes. Los últimos cuatro años han sido los más calurosos de la historia y las temperaturas invernales del Ártico han aumentado 3 °C desde 1990.

    Para esta Cumbre de Naciones Unidas, los estados fueron llamados a plantear una vía hacia la transformación completa de las economías siguiendo los objetivos de desarrollo sostenible.

    Una lucha en pro de los más vulnerables

    Ante la transición drástica que el planeta debe enfrentar para evitar catástrofes mayores, la ONU convocó a que las acciones propuestas por los países se centraran en la creación de oportunidades y la protección de los sectores afectados por los impactos negativos del cambio climático.

    En este sentido, Alvarado puntualizó: “Estamos aquí porque vivimos tiempos complejos, donde la ciencia nos dice que tenemos solo una ventana de 12 años para solventar la crisis climática y la crisis ambiental que está llevando a una extinción masiva de especies. Ambas son crisis que afectan, en mayor escala, a las poblaciones más vulnerables. Por esto el llamado de nuestros jóvenes en las calles a que nosotros como líderes políticos, tomemos cartas en el asunto y aceleremos la transformación de nuestras economías hacia la descarbonización y resiliencia”.

    “Costa Rica está comprometida con impulsar la ambición a nivel global y a través del multilateralismo”, indicó, tras recordar que “somos los anfitriones de una PreCOP No Convencional” que se realizará del 8 al 10 de octubre en Costa Rica, para seguir apoyando la Campaña Global por la Naturaleza y promover la meta del 30 por 30, con enfoques inclusivos de género y derechos humanos.

    Esta lucha planetaria se da ante la urgencia de contener y revertir los severos impactos derivados de la contaminación producida por el modelo económico actual, basado en su mayoría en los combustibles fósiles. “Somos conscientes que las transformaciones producen incertidumbre, incluso miedo que puede paralizarnos. No debemos paralizarnos.  Es posible un cambio transformacional, con crecimiento económico y mejora de la calidad de vida. Avancemos juntos para alcanzar lo que parece imposible”, finalizó.

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