- En el Día Mundial de las Telecomunicaciones, el mandatario celebró el beneficiario número 100 mil de Hogares Conectados.
- El Programa facilita acceso a Internet y una computadora portátil durante tres años a familias en situación de pobreza, ubicadas en distritos de atención prioritaria.
- Con una presencia en el 90% del territorio nacional, esta iniciativa forma parte de la estrategia del Gobierno por reducir la brecha digital en Costa Rica.
El hogar conectado número 100 mil es liderado por doña Miriam Aguilera, una abuela de 72 años, sobreviviente de cáncer y vecina de San Sebastián, en San José.
En el marco del Día Mundial de las Telecomunicaciones y la Sociedad de la Información, el Presidente de la República, Carlos Alvarado, llegó esta mañana sorpresivamente a la casa de la familia compuesta por doña Miriam y sus nietos Mónica de 26 años y José Daniel de 18.
La visita la realizó en compañía de los jerarcas del Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS), el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Telecomunicaciones (MICITT), y la Superintendencia de Telecomunicaciones (SUTEL), instituciones a cargo del programa.
Fueron los jerarcas quienes llegaron primero a la casa de doña Miriam, ubicada en la calle Jiménez del barrio San Martín. Tras compartir por unos minutos, le propusieron hacer una video-llamada al Presidente utilizando la computadora. Don Carlos los atendió pero les indicó que se tenía que retirar, pues debía realizar una diligencia importante.
Minutos después, el mandatario tocó la puerta de la humilde vivienda de doña Miriam. Ella lo recibió con un efusivo abrazo. “Ay Dios mío señor Presidente, ¿cómo está mi chiquito?”, le preguntó visiblemente emocionada.
Mientras conversaban en la pequeña sala de la casa, llegó corriendo doña Alice, asustada por la movilización que había en la vivienda de su hermana.
“Vea quién está acá”, le dijo doña Miriam. Y al reconocer al Presidente, doña Alice lo abrazó temblorosa y con lágrimas en los ojos: “Mucho gusto mi chiquito. Qué lindo conocerlo. Es que uno lo ve en tele y la verdad es que es más guapo en persona”. Y de inmediato expresó: “Voy a ir a tomar una taza de café porque estoy en un puro temblor”.
En la conversación con la familia de la conectada número 100.000, el Presidente resaltó la importancia de la implementación de este programa para reducir la brecha digital en nuestro país y asegurar el acceso a la formación de la población, en especial la más vulnerable.
Explicó a doña Miriam y a sus nietos que el objetivo de Hogares Conectados es facilitar oportunidades a las familias en situación de pobreza, para que tengan acceso a una computadora y puedan utilizar Internet de manera segura, responsable y productiva, para buscar información clave e importante, para el estudio, para el trabajo y para la vida diaria.
José Daniel, quien cursa el décimo año en el Instituto de Educación Comunitaria (IPEC) 15 de Setiembre, le contó al Presidente que, gracias al programa, “ahora le puedo sacar citas de la Caja a mi abuela por Internet. Además, uso la compu todos los días para hacer proyectos y tareas del colegio desde mi casa sin necesidad de salir”, le dijo.
“Antes iba donde una compañera que tenía computadora; ahora puedo buscar las cosas que necesito en Internet y me dan más ganas de investigar. También le enseño a mi mamá y hermana”, comentó José Daniel, quien espera al terminar el colegio y seguir la carrera de Nutrición.
Para acceder a Hogares Conectados, los operadores inscritos localizan a las familias mediante una lista proporcionada por el Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS); cada familia tendrá la potestad de decidir si es parte o no del programa. Una vez que suscriben el contrato con el operador de su preferencia, la empresa le instalará el servicio de internet en la casa y entregará una computadora portátil.
“Hemos estado trabajando de la mano del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Telecomunicaciones para fortalecer el programa y brindarles a más familias la posibilidad de estar conectadas”, comentó el Ministro de Desarrollo Humano e Inclusión Social y Presidente Ejecutivo del IMAS, Juan Luis Bermúdez.
“Sabemos que una computadora en un hogar trae un efecto inclusivo inmediato para las familias en situación de pobreza y vulnerabilidad, pues les permite por un lado conectarse con su comunidad, pero también con los servicios de las instituciones públicas para buscar empleo, sacar una cita o hacer las tareas sin salir de la casa, como nos lo indicaba José Daniel”, destacó.
El programa tiene presencia en el 90% del país y llega a 436 distritos. A la fecha, el IMAS ha referido a 122.051 familias para que puedan optar por este servicio, 100 mil de ellas ya cuentan con el acceso a internet y la computadora.
«Es representativo el día de hoy porque celebramos haber llegado a 100.000 familias con el Proyecto Hogares Conectados. Este proyecto nació con la idea de poder llevar un dispositivo electrónico y conectividad a quienes se encuentran en vulnerabilidad. Para nosotros esto representa un logro, pero también el reto no solamente de incrementar la cantidad de hogares a los cuales llegamos, sino también de mejorar la calidad del servicio y sobre todo lograr disminuir la brecha de acceso”, indicó el Ministro de Ciencia, Tecnología y Telecomunicaciones (MICITT), Luis Adrián Salazar Solís.
Mencionó también el trabajo que están trabajando en conjunto con organizaciones no gubernamentales, fundaciones y empresa privada para brindar un contenido que genere un mayor valor agregado sobre el acceso que se tiene.
Este programa es parcialmente subsidiado. El precio de la computadora y la conexión a Internet es pagado por Fondo Nacional de las Telecomunicaciones (FONATEL), quien asume un porcentaje, y la otra parte, las familias usuarias de manera mensual durante tres años.
“El Programa Hogares Conectados representa una inversión de 51 millones de dólares, que le permiten a miles de personas en estado de vulnerabilidad la posibilidad de aumentar su conocimiento, establecer negocios y en general mejorar su condición a través del uso productivo de la tecnología”, explicó el ingeniero Gilbert Camacho, presidente del Consejo de la Superintendencia de Telecomunicaciones, administradora del fondo.
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