Iniciativa ordena, potencia y orienta estratégicamente el trabajo penitenciario como herramienta que facilite la reinserción social.
Fortalece alianzas con instituciones privadas y públicas, programas de emprendimiento con potencial empresarial y construcción de más módulos penitenciarios con mano de obra de internos.
Trabajo en centros penitenciarios contribuye a que la persona privada de libertad se mantenga ocupada, genere ingresos y adquiera mejores condiciones para la reinserción a la sociedad, entre otros beneficios.
El Ministerio de Justicia y Paz lanzó este lunes la estrategia “Construyendo Oportunidades”, con el objetivo de generar trabajo en el Sistema Penitenciario para el fortalecimiento de las habilidades socio laborales de las personas privadas de libertad y con ello contribuir al proceso de reinserción social. La presentación tuvo lugar este lunes en Casa Presidencial, con la participación del Presidente Carlos Alvarado Quesada, la Ministra de Justicia y Paz, Marcia González Aguiluz, empresarios y autoridades vinculadas con esta estrategia. “El trabajo en los centros penitenciarios contribuye, además de reducir la conflictividad, a que la persona privada de libertad se mantenga ocupada, genere un ingreso para cubrir sus necesidades básicas y las de su familia, y adquiriera mejores condiciones para procurar su reinserción a la sociedad”, comentó el Presidente de la República. Precisamente, la estrategia “Construyendo Oportunidades” procura alcanzar este objetivo de manera consistente a través de tres componentes: el jurídico, las alianzas estratégicas y el técnico-administrativo. “Construyendo oportunidades viene a aportar en el proceso de ordenar, potenciar y orientar estratégicamente el trabajo penitenciario; permitirá dotar a la población privada de libertad de oportunidades para obtener un incentivo económico, así como adquirir destrezas técnicas y habilidades para una mejor incorporación al mercado laboral una vez egresados del sistema”, explicó la Ministra Marcia González Aguiluz. En la actividad de lanzamiento de la Estrategia, cuya meta es lograr un aumento del 10% de la ocupación penitenciaria al año, se mostraron los primeros resultados concretos de esta iniciativa: Consolidación de datos sobre el trabajo penitenciario. Según los datos recopilados, alrededor de 5.908 privados de libertad realizan diferentes tipos de trabajo, cerca de un 38% de la población total. La mayoría se ubica en actividades autogestionarias (20% del total) seguida de servicios para la administración penitenciaria (12%). Elaboración del primer perfil ocupacional de los privados de libertad del país. Se e realizó un sondeo entre 5.282 personas privadas de libertad para elaborar un perfil ocupacional. Casi la mitad (45%) tenía experiencia en actividades de construcción fuera de la cárcel, pero de manera informal. En segundo lugar, aun 9% se había desempeñado en comercio y servicios, y en tercer puesto, un 4% en actividades agrícolas. Diagnóstico de las áreas destinadas a estas actividades. También se desarrolló un diagnóstico de las áreas destinadas para el trabajo penitenciario, lo que permitirá un trabajo de la Dirección de Adaptación Social y el Departamento de Arquitectura para ampliar las opciones de ocupación laboral, hacer un uso eficiente de ellas y mejorar sus condiciones. Convenios. Se negociaron tres convenios que representan nuevas oportunidades de trabajo para las personas privadas de libertad, los cuales fueron firmados durante la presentación de la estrategia, con las empresas Euromobilia, Eurotoldos y la Asociación de Desarrollo de Aguas Zarcas. Los tres ejes de la estrategia
Componente jurídico. A partir de un análisis de la normativa existente y para enfrentar la dispersión identificada, se elaboró un Reglamento de Trabajo Penitenciario, que establece parámetros objetivos, roles y condiciones para el desarrollo del trabajo penitenciario. Se busca con ello fortalecer las normas que regulan el trabajo de las personas privadas de libertad. Área de alianzas estratégicas. En esta área se incluyen las instituciones públicas como el Instituto Nacional de Aprendizaje (INA); Ministerio de Economía, Industria y Comercio (MEIC), Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS), y Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS), entre otros, para brindar herramientas socio-laborales y facilitar la reincorporación al mercado laboral. Asimismo, alianzas público-privadas para ampliar las oportunidades de tranajo en el sistema penintenciario, sumándose a experiencias exitosas como la desarrollada con la Fundación TO y la Dos Pinos, así como las que se han llevado adelante con el MEP y con el ICODER y otras instituciones públicas que adquieren bienes producidos en el sistema penintenciario. Eje técnico administrativo. Incluye la atención profesional de la población privada de libertad, así como el fortalecimiento del Departamento Industrial y Agropecuario y proyectos constructivos con mano de obra de personas privadas de libertad. En este contexto, se proyecta edificar tres módulos en los centros penales CAI Liberia, CAI 26 de Julio (Puntarenas) y CAI Nelson Mandela (San Carlos). También se impulsarán programas de emprendimiento que permitirán a las personas privadas de libertad trascender de actividades meramente artesanales hacia emprendimientos con potencial empresarial. Todo ello mediante la generación de capacidades técnicas, empresariales y socio-emocionales, y el acceso a fuentes de financiamiento en condiciones favorables. [embed]https://www.facebook.com/carlosalvaradoquesada/videos/2250362748321370/[/embed]]]>