Esta tarde, la Administración Superior del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) y las organizaciones laborales, que integran el Frente Interno de los Trabajadores (FIT), llegaron a un acuerdo para suspender la huelga, que inició el pasado 10 de setiembre.
En el documento, la Administración se compromete a que no existirán actos de discriminación, amenaza o intimidación, en contra de quienes participaron de manera pacífica del movimiento huelguístico.
Por su parte, los trabajadores se comprometen a reintegrarse de inmediato a sus labores, con el fin de atender todas las necesidades que se requieran para la prestación y el aseguramiento de los servicios de electricidad y telecomunicaciones en todo el país.
“Este acuerdo es de gran satisfacción, ya que garantiza que, con la incorporación de la totalidad del personal, nuestros servicios funcionarán de forma óptima, para beneficio de todos los costarricenses”, señaló Irene Cañas, presidenta del Grupo ICE.
Una vez en firme las sentencias sobre la calificación de la huelga –promovidas por el ICE, la Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL) y Radiográfica Costarricense (RACSA)– la Administración procederá conforme lo dispone el ordenamiento jurídico.
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