Ministerio de Hacienda y Presidencia de la República elaboraron un análisis sobre el aporte de los distintos sectores a la reforma fiscal.
Estudio confirma que un 80% lo pagará el 20% de los hogares con más ingresos y las empresas.
Un 92% de los recursos que se obtendrán adicionalmente del impuesto sobre la renta vendrá del 10% de hogares con más ingresos.
Investigación detalla el mecanismo de devolución del 1% a la canasta básica.
La Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas generará una disminución en la desigualdad económica medida por el coeficiente Gini, concluye el análisis.
Bajo el título “¿Quién paga la reforma fiscal en Costa Rica?”, el Ministerio de Hacienda y la Presidencia de la República elaboraron un análisis de los principales hallazgos estadísticos sobre la magnitud y distribución de los aportes tributarios de cada sector en el Proyecto de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas (expediente 20580). El estudio expone, inicialmente, la grave situación fiscal que enfrenta Costa Rica: en el 2017 el Gobierno Central cerró con un déficit equivalente a 6,2% del Producto Interno Bruto (PIB) y para el 2018 se proyecta que alcanzará un 7.25%. Explica que el Proyecto de ley 20580 pretende reducir en cerca de 3.5% del PIB para el 2022 y dotar una mayor sostenibilidad a las finanzas del país mediante tres formas: aumentando los ingresos tributarios, conteniendo el gasto público e introduciendo mecanismos para fortalecer la administración hacendaria y reducir la evasión. La investigación analiza la composición de los aportes según los distintos tipos de impuestos: directos o indirectos, o según de donde provienen (hogares o empresas o personas no domiciliadas) y la magnitud y distribución del aporte de cada uno de los hogares al total que se espera recaudar con la reforma. Concluye que el peso de la reforma recae sobre el 80% de población con más recursos y que la progresividad de la propuesta permitirá que genere una disminución en la desigualdad económica medida por el coeficiente Gini. Algunos de los principales hallazgos de la investigación son los siguientes: Mayores ingresos provendrán del Impuesto sobre la Renta. 57% de los ingresos tributarios adicionales que generará la reforma fiscal proviene de reformas al impuesto de renta (salarios, rentas, mercado financiero, remesas, utilidades, excedentes, ganancias patrimoniales y pymes) y el otro 43% viene de impuestos indirectos, IVA. 80% lo pagará el 20% el sector con más ingresos. Un 80% de lo recaudado lo pagará el 20% de hogares con más ingresos y las empresas. Entre ₡2.600 y ₡3.000. El 20% de hogares más pobres pagará entre ₡2.600 y ₡3.000 colones al mes producto de la reforma tributaria. Esos mismos grupos reciben entre ₡35.000 y ₡43.000 colones mensuales en promedio de las transferencias del estado (IMAS, becas, subsidios, pensiones del RNC). Entre ₡22.000 y ₡117.000. El 20% de los hogares más ricos pagarán entre 22 mil y 117 mil colones más en promedio al mes por la reforma tributaria. Pago de renta. El 70% de los hogares de menor ingreso no pagará impuesto sobre la renta. El 10% de los hogares de mayores ingresos pagará el 92% de este impuesto. Impuestos directos. El 90% de los impuestos directos recae sobre el 10% de hogares con mayores ingresos y empresas. El análisis estadístico del Ministerio de Hacienda y de la Presidencia de la República incluye también, entre otros aspectos, el mecanismo de devolución del 1% a la canasta básica que permitirá el fortalecimiento del Régimen no Contributivo (RNC), lo que implicará un aumento aproximado de 3.500 nuevas pensiones para adultos mayores en condición de pobreza o pobreza extrema. ]]>