Mandatario reafirmó compromiso de su gobierno con los más necesitados durante la presentación este viernes de la Estrategia de Seguridad Humana en distritos prioritarios.
Puente al Desarrollo ha logrado atender a más de 55.000 familias, lo que equivale a unas 200.000 personas. “Ahora el desafío es impactar a las comunidades con esta estrategia incorporando a la sociedad civil, municipalidades, empresa privada e instituciones”, dijo.
El Presidente insistió en la importancia del saneamiento de las finanzas públicas para que exista un entorno económico estable que proteja a las familias y permita al Gobierno implementar la atención a la pobreza.
“No habrá política social que revierta la pobreza si tenemos una inflación galopante o tasas de interés disparadas o perdemos nuestra capacidad de inversión del país”, advirtió.
Visiblemente conmovido por su reencuentro la mañana de este viernes con sus raíces en la función pública (el Instituto Mixto de Ayuda Social), el presidente Carlos Alvarado Quesada reafirmó el compromiso de su gobierno de trabajar por la población más necesitada.
Las declaraciones las dio en la actividad de lanzamiento de la Estrategia de Seguridad Humana, que tuvo lugar en Casa Presidencial con una nutrida asistencia de altos jerarcas de gobierno, representantes de la empresa privada, alcaldes, diputados, y funcionarios y beneficiarios de Puente al Desarrollo.
El presidente Alvarado hizo un repaso de los logros alcanzados en los últimos años a partir de 2015 con la implementación de la Estrategia Puente al Desarrollo, que logró superar la meta comprometida de atención a más de 55.000 familias.
“Estos datos reflejan que hemos atendido a unas 200.000 personas. Nuestro compromiso es ampliar esta cobertura hasta llegar a 500.000, pasando de 55.000 a 135.000 familias”, dijo.
“Con Puente al Desarrollo, eliminamos esa dispersión que obligaba a las personas ir institución por institución, articulando todas las dependencias, y rompimos con el asistencialismo existente implementando un modelo de atención integral y progresivo que tiene como centro a la persona, partiendo de una visión multidimensional”, explicó.
En su implementación, ha sido determinante para la eficiencia y la transparencia el uso de los datos y de la tecnología. Por ejemplo, la elaboración de mapas sociales en conjunto con el INEC para la ubicación y priorización de los beneficiarios; el Sistema Nacional de Información y Registro Único de Beneficiarios (SINIRUBE) que conecta las bases de datos a todas las instituciones y la ficha electrónica que permite la transmisión de datos en tiempo real.
El Presidente de la República reconoció que si bien con Puente al Desarrollo se ha logrado un importante impacto en las familias, no necesariamente ha repercutido en el entorno, donde aún persisten la violencia, drogadicción y la falta de espacios públicos.
“Ahora corresponde dar el siguiente paso: la Estrategia Integral de Seguridad Humana que hoy estamos anunciando, la cual articula las acciones del Estado con los gobiernos locales, la sociedad civil, las comunidades y la empresa privada en los distritos que tienen mayor concentración de pobreza, incidencia de delitos y presencia de asentamientos informales”, detalló.
“Nuestro trabajo ahora es hacer la transformación decidida de esos entornos con planes estratégicos en los territorios”, dijo, tras advertir que para lograrlo hay que asegurar una política económica que garantice la estabilidad en la inflación y el crecimiento económico.
De ahí la importancia de la aprobación del plan fiscal para que exista un entorno económico estable que proteja a las familias y permita al Gobierno implementar la atención a la pobreza.
“Nos hemos enfocado en garantizar la estabilidad de este país porque ese es el principal cuello de botella y no habrá política social que revierta la pobreza si tenemos una inflación galopante o tasas de interés disparadas o perdemos nuestra capacidad de inversión del país”, puntualizó.
Sobre los resultados de INEC, que indican un incremento por ingreso en los índices de pobreza en el último año, indicó que hay que verlo como un reto para revertirlo pues “tenemos las herramientas para lograrlo, siempre y cuando se logre la estabilidad de las finanzas públicas”.
Agregó que el informe de la Encuesta Nacional de Hogares reconoce en ese mismo periodo un incremento del 5.9% de las transferencias, es decir que la política social se ha expandido y está funcionando, permitiendo contener ese aumento en pobreza.
Finalmente, reiteró su compromiso de “trabajar por quienes más lo necesitan. No me olvido de mis raíces en la gestión pública, en el IMAS y el Ministerio de Trabajo”, reflexionó, tras hacer un llamado para “salir adelante y derrotar la pobreza con innovación, con inteligencia, con transparencia”, concluyó.]]>
