País recibe 196 piezas precolombinas decomisadas en Venezuela

  • Piedra y cerámica componen colección, además de dos esferas
  • Museo Nacional de Costa Rica invirtió ¢12.5 millones en embalaje y transporte de las piezas
  • San José, 17 de enero de 2018. Después de un proceso de 7 años, el pasado 5 de enero llegaron por vía marítima al país 196 piezas precolombinas procedentes de Caracas, Venezuela. Se trata de piezas confeccionadas principalmente en piedra y algunas en cerámica, decomisadas entre el 2010 y el 2014 en ese país suramericano. El tesoro viajó de Limón a San José y fue depositado en los acopios del Museo Nacional de Costa Rica (MNCR) el 15 de enero de 2018.

    La fecha y forma sobre cómo esas piezas viajaron a Venezuela es una incógnita; sin embargo, por su peso y dimensiones la mayoría debió salir vía marítima. La colección incluye 196 piezas arqueológicas de diferentes regiones del país. Entre ellas, dos esferas de piedra de 55 cm y 78 cm de diámetro, así como metates enteros y cercenados, barriles, guerreros, vasijas en barro, entre otros artículos. Las piezas provienen de todas las regiones arqueológicas del país: de la zona central, Atlántica, Pacífico Norte y Diquís.

    Luis Guillermo Solís, Presidente de la República, expresó: “Hoy Costa Rica está más completa. Hoy el país, con el regreso de estas casi 200 piezas de nuestro patrimonio, se complementa; se llena de parte de sí que no estaba con nosotros. Es como si la República tuviera un pedacito más de cuerpo, hoy. Hemos recuperado las expresiones de talento, de ciencias, de ideología, de las cosmovisiones de nuestros pueblos precolombinos, recogidas en esta colección que durante tantos años estuvo fuera del suelo nacional y que sufrió tantos vejámenes en manos de quienes ilegalmente se apropiaron de esta importante parte de nuestra historia.

    Sylvie Durán, ministra de Cultura y Juventud, expresó que “los países del continente nos hemos comprometido a colaborar los unos con los otros en todos estos casos de recuperación de patrimonio y esta es una experiencia más en la que agradecemos profundamente el compromiso que tuvieron las autoridades de Cultura del Gobierno Venezolano para apoyar al Estado costarricense; igualmente, agradecemos el trabajo mancomunado de la Cancillería de la República y de la Oficina de Asesoría Técnica y de Relaciones Internacionales de la Fiscalía General de la República y del Museo Nacional de Costa Rica. Esta es una diligencia que lleva muchos trámites para que sea alcanzada y fue posible mediante la colaboración de todas las partes”.

    Según Rocío Fernández, directora del MNCR, “este caso de repatriación de acervo arqueológico costarricense representa un hito legal en la lucha contra el tráfico ilícito de bienes culturales en América Latina”.

    Los artículos decomisados fueron embalados en 96 bultos y su peso total ascendió a 5000 kilos.

    Una colección y tres decomisos. La denominada colección Mannil registra tres decomisos:

    1. Las primeras piezas –57 en total- fueron detectadas en el 2009 en la aduana de La Guaira, Caracas y tenían como destino los Estados Unidos. Las autoridades aduaneras de Venezuela contactaron al gobierno de Costa Rica por medio de la Embajada de Costa Rica en dicho país y se coordinó un peritaje para corroborar la autenticidad de las mismas.
    2. En julio del 2010, las autoridades costarricenses allanaron una propiedad de la familia Mannil en San Rafael de Heredia. Se decomisaron 108 piezas precolombinas entre vasijas de barro de gran tamaño, petroglifos, cabezas trofeo, metates, asientos, barriles y figuras zoomorfas, provenientes del Caribe, Pacífico Sur y Pacífico Norte. Destacaron en este decomiso 14 esferas del Diquís.
    3. En septiembre del 2014, autoridades de Venezuela allanaron la casa de los Mannil en Caracas, donde encontraron 140 piezas precolombinas provenientes de Costa Rica. Se decomisó un lote de 78 objetos. Los restantes, por su volumen y al estar adheridos a las paredes, se quedaron en la propiedad con una orden de no poder moverlos ni comercializarlos. A esta casa se le conocía como la “Casa de los Jaguares”, debido a que sus propietarios tenían cabezas de metate en forma de jaguar empotradas en las paredes como decoración. Los metates cercenados o mutilados no fueron encontrados. En 2015 la familia Mannil vendió la propiedad y los nuevos dueños quitaron las piezas. Las autoridades venezolanas retiran 62 piezas y solicitan a Costa Rica un nuevo peritaje de las mismas.

    ¿Cómo se descubrió la colección?

    La primera alerta data de los años 80, cuando llegó al Museo Nacional de Costa Rica una revista con casas de personas adineradas alrededor del mundo que incluía la de Harry Mannil en Caracas. En las fotos se podía observar una gran cantidad de piezas y cabezas de metates empotradas en las paredes.

    ¿Cómo es el proceso de repatriación?

    El proceso ha sido largo y ha requerido de tres viajes a Venezuela por parte de una experta del MNCR para realizar el peritaje de las piezas arqueológicas. Se ha debido esperar el resultado de las gestiones realizadas por el Ministerio Público de Costa Rica mediante cartas rogatorias enviadas a Venezuela por la vía diplomática y dar seguimiento a gestiones e intercambio de documentos entre ambos países.

    ¿Cuánto costó el transporte?

    El MNCR debió presupuestar los recursos económicos para pagar confección de cajas y embalaje, seguros, transporte y desalmacenaje en aduanas. El costo del transporte es de ¢12.5 millones de colones, del presupuesto del MNCR.

    ¿Cuáles fueron los cuidados para transportarlas?

    Los objetos fueron cuidadosamente empacados por el personal de la empresa Clover, contratada en Venezuela por Mudanzas Mundiales. Se empacaron de acuerdo con la disponibilidad de materiales en Venezuela. Se utilizó papel periódico blanco, burbujas de plásticos y cartón; una vez empacados, se colocaron dentro de las cajas.

    En el proceso de embalaje se contó con colaboración de expertos de la Galería Nacional de Arte de Venezuela y del Instituto de Patrimonio Cultural de Venezuela, así como de la especialista del Departamento de Protección del Patrimonio Cultural del MNCR.

    Los 96 bultos viajaron juntos en un solo contenedor, sin ningún otro producto. El contenedor viajó con tres marchamos o seguros, que fueron retirados en presencia de agentes de aduanas y de funcionarios del MNCR para corroborar la integridad de la carga.

    ¿Quiénes tenían estas piezas en depósito luego de su decomiso?

    Las piezas estuvieron en custodia del Instituto de Patrimonio Cultural de Venezuela (IPC) y en los depósitos de colecciones de la Galería Nacional de Arte en Caracas.

    Las piezas fueron conservadas en muy buenas condiciones por el estado venezolano, durante los años que estuvieron incautadas y se retornaron al país en iguales condiciones de conservación.

    En la entrega de las piezas participaron el titular del Ministerio del Poder Popular para la Cultura (MPPC), el presidente del IPC y el Ministerio del Poder Popular para las Relaciones Exteriores la Fiscalía de Venezuela. Por el Museo Nacional de Costa Rica, Marlin Calvo, jefa del Departamento de Protección del Patrimonio y comisionada en la repatriación y por la Embajada de Costa Rica en Venezuela la cónsul Ana Patricia Villalobos.

    En el proceso se destacó la labor de coordinación y colaboración entre las instituciones venezolanas y costarricenses.

    Al respecto, la directora del MNCR destacó que “Costa Rica ha demostrado gran capacidad de gestión diplomática y jurídica para hacer valer sus derechos a proteger y salvaguardar el patrimonio cultural”.

    A partir de ahora, las piezas enriquecen el acervo patrimonial del Museo Nacional de Costa Rica. Se utilizarán en investigación de las culturas precolombinas, formarán parte de nuevas exhibiciones y reemplazarán piezas de la exhibición permanente.

    ]]>