El Refugio Nacional de Vida Silvestre Mixto Caño Negro estrena nueva infraestructura turística donde se invirtieron más de 800 millones de colones. Quienes visiten el Refugio serán recibidos con un centro de visitantes, una torre de 18 metros de altura para observación de aves, un atracadero para embarque y desembarque de turistas y un sendero terrestre elevado.
Estas obras forman parte del Proyecto de Fortalecimiento del Programa de Turismo Sostenible en Áreas Silvestres Protegidas (BID-Turismo), el cual busca consolidar el turismo en las áreas silvestres protegidas (ASP) con el objetivo de fortalecer la gestión sostenible, reactivación económica de los territorios, aumentar la visitación turistica y a la conservación de los recursos naturales de la mano con las comunicades.
La inversión incluyó también un Plan de Gestión y Uso para los muelles Municipales de los distritos de Caño Negro y Los Chiles y se desarrolló una estrategia operativa para implementar el Plan Municipal de Gestión Integral de Residuos Sólidos de la Municipalidad de Guatuso.
Asimismo, se desarrolló material promocional y talleres para el fortalecimiento y apoyo de futuros emprendimientos locales en temas como turismo sostenible, mercadeo, asesoría legal, liderazgo y emprendedurismo.
Las obras fueron entregadas a la comunidad y Guardaparques por el Presidente de la República, Luis Guillermo Solís Rivera y el Ministro de Ambiente y Energía, Edgar Gutiérrez. También participaron la viceministra de Ambiente, Patricia Madrigal, el director del SINAC, Mario Coto, guardaparques, voluntarios y personas de la comunidad.
“El porcentaje de ejecución que nos encontramos al inicio de la Administración era muy bajo, de un 5.7%, logramos cambiar esa parálisis mediante el arduo trabajo del MINAE lo que permitirá que se ejecute un 100 % de este empréstito. Esta nueva infraestructura es necesaria para reactivar la economía local, aumentar la visitación turistica y dotar de mejores condiciones de trabajo a nuestros guardaparques” Luis Guillermo Solís Rivera, Presidente de la República.
El Refugio Nacional de Vida Silvestre Mixto Caño Negro es la última ASP de las diez elegidas en todo país donde se entrega a la comunidad infraestructura para el turismo dentro y fuera de estas áreas, acompañada también por el fortalecimiento de la gestión sostenible del turismo mediante estrategias, capacitaciones e instrumentos para un mejor manejo y estímulo de esta actividad en las ASP y las comunidades vecinas.
Las otras ASP incluidas en el Proyecto BID-Turismo son los parques nacionales Manuel Antonio, Tortuguero, Rincón de la Vieja, Corcovado, Volcán Arenal, Volcán Poás, Marino Ballena, Volcán Irazú y Cahuita. La visitación turística solamente a esas áreas alcanzó la cifra de 1.807.352 personas en 2016, lo que refleja la importancia que tienen para el país y las comunidades aledañas.
El proyecto BID-Turismo ha invertido un total de US$25 millones mediante un préstamo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) por $19 millones y una contribución de $6 millones del Gobierno de la República por medio del SINAC, el Ministerio de Hacienda y las municipalidades del área de influencia de las ASP incluidas en el proyecto.
Solamente en infraestructura turística se han invertido alrededor de $13 millones de dólares en obras al interior de las ASP y más de $1.3 millones en el mejoramiento de las rutas de acceso a las mismas.
Sobre el Refugio Nacional de Vida Silvestre Mixto Caño Negro
La importancia turística del Refugio de Vida Silvestre Mixto Caño Negro está basada principalmente en el avistamiento de aves, ya que se aprecian más de 300 especies, como es el caso del martín pescador norteño, el garzón azulado y la reinita alidorada.
El refugio se ubica en la sección baja de la cuenca del río Frío, en la provincia de Alajuela, cerca del límite fronterizo con Nicaragua, entre los cantones de Guatuso y Los Chiles.
Cuenta con una extensión de 9.969 hectáreas. Caño Negro es Sitio RAMSAR (humedal de importancia internacional) y se caracteriza por presentar un clima tropical lluvioso. Constituye, junto con las zonas húmedas al sur del Lago de Nicaragua, uno de los ejemplos de zona húmeda más sobresalientes de Mesoamérica.
Otro de sus atractivos radica en que aún cuenta con áreas habitadas por familias indígenas, con las que se puede practicar ceremonias religiosas en algunos puntos considerados sagrados y que constituyen toda una experiencia vivencial para los visitantes. El refugio está abierto todos los días de 8 a.m. a 4 p.m. y la tarifa de ingreso es de 800 colones para nacionales y residentes y US$5 para no residentes.
Lilliam Loría M.
Departamento de Prensa y Relaciones Públicas
Ministerio de Ambiente y Energía.
Tel. (506) 2233-4533 Ext. 1159.
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