En la próxima Asamblea General de Naciones Unidas.Panel de las Naciones Unidas tiene un año de trabajo y articulación de alianzas para erradicar los obstáculos que impiden a las mujeres una inserción laboral justa. Eliminar las limitaciones que impiden a las mujeres acceder al mercado laboral en igualdad de condiciones es una esfuerzo que requiere de liderazgo y acciones conjuntas de Gobiernos, sociedad civil, academia y sector privado, tarea para la cual Costa Rica fue designada en la copresidencia del Panel de Alto Nivel para el Empoderamiento Económico de las Mujeres de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
El Presidente de la República, Luis Guillermo Solís y la CEO de IKEA-Suiza Simona Scarpaleggia, lideran este panel que tiene como objetivo un llamado a la acción mediante recomendaciones de acciones específicas, políticas y buenas prácticas que permitan el empoderamiento económico de las mujeres.
El Panel de Alto Nivel emitió un informe final en las Naciones Unidas para impulsar 24 recomendaciones que posibiliten superar las siete barreras estructurales de la autonomía económica de las mujeres: cambios culturales y estereotipos; reformas a las leyes y regulaciones discriminatorias; el reconocimiento, la reducción y la redistribución del trabajo no remunerado, en particular el cuido; el acceso a activos digitales, financieros y patrimoniales; cambios en la cultura y las prácticas empresariales; y prácticas del sector público en la contratación y el empleo, y el fortalecimiento de la visibilidad, la voz y la representación colectiva de las mujeres.
El Presidente de la República, Luis Guillermo Solís, la Ministra de la Condición de la Mujer, Alejandra Mora; el Ministro de Relaciones Exteriores y Culto, Manuel González, y las integrantes del Panel de Alto Nivel, sostuvieron una reunión con el Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres para presentarle los resultados y el informe final de acciones y recomendaciones para el empoderamiento económico de las mujeres.
La propuesta de implementación planteada al Secretario General de la ONU por parte del Presidente Solís Rivera, consiste en que Costa Rica lidere un grupo de países para impulsar que en la próxima Asamblea General de las Naciones Unidas se acojan las recomendaciones contenidas en el Informe Final del Panel de Alto Nivel para el Empoderamiento de las Mujeres, con el fin de que sea un esfuerzo multilateral por parte de los Estados miembros.
“Corresponde a los Gobiernos asumir el papel de visibilizar y concretar las recomendaciones específicas que contiene el segundo informe. Avanzar en las alianzas con las empresas privadas que también lideran esfuerzos para atender las propuestas del Panel de Alto Nivel. Costa Rica seguirá insistiendo para que nuestras niñas y mujeres asuman plenamente los derechos que les corresponden de tener trabajo reconocido, remunerado y de calidad, que genere riqueza y combata el rostro femenino de la pobreza” enfatizó Solís Rivera.
Llamado a la acción- El Informe Final del Panel de Alto Nivel enfatiza en la necesidad de erradicar la estigmatización de las trabajadoras informales y mecanismos para salir de la informalidad, así como la eliminación de la violencia que sufren las mujeres.
- En relación con las normas, debe expandirse la cobertura de la protección social y el acceso a la justicia con garantías legales.
- Se considera el cuido como un tema estructural que debe ser reconocido y dejar de ser invisible por su aporte fundamental a la economía. Debe redistribuirse con la incorporación de otros actores, con un rol especial del Estado, los hombres y las empresas.
- Las mujeres deben tener la posibilidad de acceder los servicios digitales y financieros. Se debe trabajar para mejorar la distribución de la titularidad de los recursos, como la tierra.
- Las empresas deben tener actitudes de autorevisión, para identificar los liderazgos de las mujeres, espacios para toma de decisiones, cadenas de valor que respeten la igualdad, que entiendan a las mujeres como actores económicos.
- Debe continuarse con acciones públicas afirmativas y la incorporación activa de las voces colectivas de las mujeres. Además, es urgente aplicar políticas macroeconómicas para empoderar a las mujeres y generar empleos decentes.
- En materia de protección jurídica, es necesario reformar leyes que generan discriminación y sustituirlas por normas que estimulen la igualdad, ampliar la cobertura de la protección social, crear un entorno legal que cubra a las trabajadoras informales, y aumentar el acceso de las mujeres a la justicia.
- En el área del cuidado, se recomendó reconocer los niveles de los trabajos de cuido que suelen recaer en la mujer, garantizar un trabajo decente para quienes laboren en forma remunerada en estas acciones, mientras se fomenta un cambio social para redistribuir las labores de cuido con los hombres.
- En el área de culturas y prácticas empresariales, se aconsejan las autoevaluaciones sobre temas que van desde la remuneración, el liderazgo y la responsabilidad social corporativa, a incentivar objetivos de inclusión de género.
- En el tema de mejorar las prácticas del sector público, se recomienda promover la igualdad de género con cuotas para la contratación, e impusar empresas propiedad de mujeres estableciendo metas. Además, proporcionar apoyo a trabajadoras informales y agrí-colas para que puedan participar en contrataciones públicas.
Encuentre el Informe de la Secretaría General de la ONU sobre Empoderamiento Económico de las Mujeres en:
UNWomen-Report-03-2017.]]>