El Presidente de la República advirtió que este no es un tema que compete solo a Costa Rica y Panamá, sino que es del continente y el mundo entero.Costa Rica está atendiendo en el borde fronterizo con Panamá a unos 600 migrantes extracontinentales que se encuentran en situación irregular. El Presidente de la República, Luis Guillermo Solís Rivera, declaró este martes que el país solicitará una reunión para los próximos días de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (CELAC) y de la Organización de Estados Americanos (OEA) para hacer frente a la crisis de los migrantes continentales y extracontinentales que afronta la región.
Durante una rueda de prensa después del Consejo de Gobierno, Solís Rivera, dijo que en tanto se encuentra una solución al problema el Estado aplicará las leyes de migración, siempre bajo el respeto de los derechos humanos de los migrantes.
“Este no es un problema de Costa Rica o de Panamá, es un problema de todo el continente y del mundo entero”, dijo Solís Rivera, en referencia a los migrantes, principalmente africanos, que actualmente se encuentran en el borde fronterizo sur de nuestro país.
Por su parte, la Directora de Migración y Extranjería, Katthya Rodríguez, estimó en unos 600 los migrantes extracontinentales que se localizan en Paso Canoas. Agregó que la mayoría de ellos están indocumentados y se desconoce el lugar de origen de muchos, por lo que están iniciando el respectivo proceso migratorio de identificación y entrevista para aplicar lo que conforme la Ley corresponde, entre cuyas opciones figura la deportación.
Rodríguez dijo que se tiene planeado habilitar un centro de detención para migrantes al que serían llevadas estas personas extracontinentales. Por su parte, el mandatario Solís destacó que hay instituciones de Gobierno en el lugar que están dando la atención humanitaria correspondiente, tal como el PANI, ya que hay niños entre los migrantes, así como mujeres embarazadas, que requieren ciertos cuidos.
La Directora de la Dirección de Migración, insistió en que la situación de este grupo de migrantes es muy diferente a la del grupo de cubanos que permaneció en el país por meses y a quienes finalmente se habilitó un “puente aéreo” para que continuaran su paso hacia los Estados Unidos. “Ellos no tienen documentos, no han sido identificados, tampoco tenemos posibilidades de obtener una vía de paso con los países hacia el norte, de igual forma no cuentan con los privilegios de una Ley como si la tenían para su ingreso los migrantes cubanos”, apuntó Rodríguez.
Tanto el Presidente como Rodríguez indicaron que por ahora la situación en la frontera es de completa calma.]]>