La participación de Costa Rica en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Clima (Cop 21) promueve la adopción de soluciones innovadoras para enfrentar este proceso, en las que el país se compromete con metas más ambiciosas.
La propuesta de Costa Rica a la XXI Conferencia de la ONU es liderada por la Vicepresidenta Ana Helena Chacón, y fue elaborada mediante un proceso participativo de consultas a los sectores agropecuario, energético, transportista, forestal y de residuos.
La Vicepresidenta atenderá la Cumbre de Jefes de Estado convocada por el Presidente Francois Hollande de Francia para hoy 30 de noviembre, acompañada por el Canciller Manuel González y los ministros Edgar Gutiérrez de Ambiente y Luis Felipe Arauz de Agricultura.
Los países presentan sus compromisos ante la COP21. En esta área, Costa Rica se compromete con una meta más ambiciosa, introduciendo el concepto de acción climática para lograr una Descarbonización Profunda de la Economía, lo que implica reducciones significativas de las emisiones, hasta llegar a emisiones netas cero para el 2085.
El compromiso de Costa Rica también incluye los componentes de adaptación a los impactos del cambio climático. A nivel de propuestas, el país considera de gran importancia promocionar soluciones innovadoras. El enfoque costarricense que presentará Chacón promueve una acción climática centrada en las personas, que garantice los derechos humanos y la igualdad de género.
“Desde una de las regiones más vulnerables del planeta, sostenemos que la acción climática incluir, no solo reducciones significativas de emisiones de gases de efecto invernadero sino también, medidas de adaptación que garanticen a las comunidades -en particular las más vulnerables- aumentar su resiliencia y su desarrollo humano”, expresó la Vicepresidenta.
En esa dirección de soluciones innovadoras y centradas en las personas, Costa Rica impulsa una meta universal de emisiones per cápita, que permitan medir la huella de carbono individual, de un máximo de dos toneladas de CO2 al 2050 y de una tonelada al 2100.
Las prioridades para Costa Rica en estas negociaciones son lograr un acuerdo ambicioso, legalmente vinculante y equitativo, que permita cumplir con la meta de no superar el aumento global de la temperatura en más de 1,5 a 2 grados Celsius.
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