- El presidente de la República y el ministro de Ambiente y Energía firmaron este viernes un decreto que además consagra la conexión entre este santuario y el de Golfo Dulce creado en el 2018.
- “Proteger estos sitios implica dar un paso adelante con la conservación de especies de trascendental importancia para los ecosistemas marinos, así como para las que están en peligro de extinción”, dijo el gobernante costarricense.
- En una visita esta semana de autoridades costarricenses y representantes del gobierno de Estados Unidos a la Isla del Coco, se anunció el interés de fortalecer acciones conjuntas de patrullaje para proteger los recursos y ecosistemas marinos y combatir el trasiego de droga.
El presidente de la República, Carlos Alvarado Quesada, y el ministro de Ambiente y Energía, Rolando Castro Córdoba, firmaron este viernes 22 de abril un decreto ejecutivo con el objetivo de garantizar la protección y la conservación del santuario de tiburones en la Isla del Coco y su conexión con Santuario del Tiburón Martillo Golfo Dulce.
Se trata del decreto ejecutivo Nº43477-MINAE “Declaración Santuario Natural de Tiburones al Parque Nacional Isla del Coco”.
Amenazado por la pesca ilegal, particularmente de especies de tiburones, el Parque Nacional Isla del Coco (PNIC) es una de las Áreas Marinas Protegidas que conforman el Corredor Marino del Pacífico Oriental Tropical, junto al Parque Nacional Galápagos (Ecuador), el Santuario de Flora y Fauna de Malpelo (Colombia), el Parque Nacional Natural Isla Gorgona (Colombia), el Parque Nacional Isla Coiba (Panamá) y el Parque Nacional Revillagigedo (México).
El PNIC es una de las zonas más ricas de biodiversidad marina y terrestre, con más del 46% de las especies endémicas de nuestro océano, la cual fue ampliada por la administración Alvarado Quesada en diciembre anterior, extendiendo la protección de los mares de Costa Rica de un 2.7% a un aproximado de 30%.
Con la firma del decreto Nº43477, se consagra la conexión entre este santuario y el Santuario del Tiburón Martillo Golfo Dulce y la preservación de especies marinas de vital importancia, comentó el presidente Carlos Alvarado, acotando que “proteger estos santuarios implica dar un paso adelante con la conservación de especies de trascendental importancia para los ecosistemas marinos, así como para las especies en peligro de extinción”.
En el Santuario del Tiburón Martillo Golfo Dulce, en el Pacífico Este Tropical, el tiburón martillo es una especie común en zonas costeras y oceánicas: las crías nacen y habitan los primeros años de sus vidas en bahías, esteros, bocas de río; y cuando los tiburones se acercan a la madurez sexual, inician grandes migraciones en aguas oceánicas.
Desde su creación, este sitio ha fortalecido la conservación de esta especie a nivel nacional e internacional, impulsando actividades educativas, de monitoreo y de capacitación, involucrando a diferentes actores de las comunidades costeras y de instituciones gubernamentales.
El ministro de Ambiente y Energía, Rolando Castro, detalló que todos estos esfuerzos, aunados a la ampliación del Área Marina Protegida, contribuyen a fortalecer la Coalición de Alta Ambición para la Naturaleza y las Personas -liderada por Costa Rica, Francia y Reino Unido- cuyo objetivo es conservar el 30% de la superficie terrestre y marina para el 2030. Al momento, 95 países se han sumado a esta iniciativa, siendo el más reciente Estados Unidos de América.
“Considerar las áreas núcleo de Malpelo, Coiba, Galápagos y la Isla del Coco implica un reto enorme para nuestros países, por lo que debemos contar con mecanismos ágiles y eficientes para la protección de estas especies endémicas y sus hábitats”, añadió Castro.
La viceministra de Agua y Mares, Cynthia Barzuna, resaltó “la importancia de las bahías e islotes de las aguas protegidas del Parque Nacional Isla del Coco, las cuales sirven de hábitat, crianza y tránsito de 15 especies de tiburones tanto en congregaciones como de manera solitaria”, dijo, subrayando su relevancia tanto biológica como económica.
Fortalecerán patrullaje conjunto para prevenir pesca ilegal no declarada y no reglamentada. Esta semana, una delegación oficial del gobierno de Costa Rica se desplazó a la Isla del Coco a bordo de buques guardacostas de Estados Unidos y de Costa Rica. La comitiva estuvo integrada por el ministro del MINAE Rolando Castro, el ministro de Seguridad Pública Michael Soto, el director del Servicio Nacional de Guardacostas, Martín Arias, y la directora del Área de Conservación Marina Cocos, Gina Cuza.
Participaron, además, representantes de la Embajada de Estados Unidos, entre ellos el ministro Consejero, Marcos Mandojana; el jefe de la Oficina del Representante de Defensa, Lance Tinstman; la directora del Centro Regional de Medioambiente, Meredith Ryder-Rude; el director de la Oficina Internacional de Asistencia Antinarcótico (INL), Bert Kraaimore; el asesor de Seguridad Marítima Ron Pailliotet, y el capitán Matt Brown, comandante del Buque Guardacostas HAMILTON.
Como parte de las necesidades detectadas por el Área de Conservación Marina Cocos (ACMC), el Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE) y el gobierno de los Estados Unidos de América se mencionó la importancia de fortalecer el patrullaje conjunto y prevenir la pesca ilegal no declarada y no reglamentada.
“Para el gobierno de los Estados Unidos resulta estratégico e invaluable proteger estos recursos de la pesca ilegal no reglamentada y no documentada, combatir el trasiego de droga y fortalecer ecosistemas marinos que permiten enfrentar la crisis climática”, comentó Mandojana.
“Ver a los buques de guardacostas de EEUU y de Costa Rica juntos en las aguas de la Isla del Coco nos llena de orgullo y envía un claro mensaje de que seguimos comprometidos a apoyar la seguridad marítima de Costa Rica y a contrarrestar todas las amenazas que enfrenta, incluyendo a la biodiversidad marina”, agregó.
En ese contexto, el representante diplomático exhortó al gobierno de Costa Rica a estrechar una cooperación científica, tecnológica y de patrullaje conjunto que permita una protección de estos importantes ecosistemas marinos.
El ministro Castro destacó la importancia del apoyo del gobierno de Estados Unidos en la protección marina de esta área del Pacífico costarricense, al tiempo que hizo un especial agradecimiento al Servicio de Guardacostas de Estados Unidos y al Buque Hamilton y su tripulación.
El Parque Nacional Isla del Coco, el de mayor tamaño en Costa Rica, es un Área Marina Protegida reconocida a nivel mundial al ser Sitio Patrimonio Natural de la Humanidad desde 1997, Sitio Humedal Importancia Internacional Ramsar (1998) y Sitio de Patrimonio Histórico-Arquitectónico de Costa Rica, (1999).
En el 2019 fue declarado Refugio Global Oceánico debido a la biodiversidad, endemismo y belleza escénica que posee, donde se protege unos de los arrecifes más extensos y ricos en especies del Pacífico Tropical Oriental, importante punto de agregación de fauna marina y zona de tránsito de especies migratorias de las poblaciones de tiburones, según informó Gina Cuza, directora del Área de Conservación Marina Cocos.