- Al presentar rendición de cuentas, autoridades del MINAE y FONAFIFO reafirmaron este martes el compromiso con el financiamiento de pequeños, medianos y micro productores.
- El año anterior se formalizaron 567 nuevos contratos del Programa de Pago de Servicios Ambientales, superando a la fecha en más de 7 mil los beneficiarios.
- Objetivo es promover al sector forestal como actor relevante de la estrategia de descarbonización, desarrollo económico rural, protección, mantenimiento y aumento de la cobertura boscosa.
- Programa de PSA recibió en 2020 un reconocimiento internacional otorgado por ONU siendo acreedor al premio en la categoría de financiamiento de inversiones respetuosas con el clima.
San José. Durante el 2020, el Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE) y el Fondo Nacional de Financiamiento Forestal (FONAFIFO) inyectaron más de ₡15 mil millones al sector forestal costarricense a través de sus programas, a iniciativas privadas de protección y aprovechamiento sostenible de los bosques y plantaciones.
Así lo dieron a conocer autoridades de ambas instituciones en la sexta edición de rendición de cuentas, presentada este martes –de manera virtual—con el objetivo de dar a conocer las cifras a representantes de gobierno, actores del sector forestal, regentes, organizaciones, territorios indígenas y público en general.
El viceministro de Ambiente, Franklin Paniagua, indicó que son múltiples los beneficios que FONAFIFO aporta a la reactivación económica del país, “el legado histórico de un programa como el de Pago por Servicios Ambientales (PSA) es imborrable”, expresó.
Precisó que “por medio de esta herramienta se han beneficiado a pequeños y medianos productores de todo el territorio nacional gracias a la formalización de 567 nuevos contratos para el 2020. Y su cartera de contratos vigentes supera los 7 mil beneficiarios, entre los que destacan poblaciones vulnerables tales como mujeres y habitantes de territorios indígenas”, acotó.
Por su parte, Jorge Mario Rodríguez, director ejecutivo del FONAFIFO, resaltó que las acciones de la institución contribuyen a su vez con el cumplimiento del eje 10 del Plan Nacional de Descarbonización, donde se establece que “se gestionará el territorio rural, urbano y costero orientado a conservación y uso sostenible incrementando los recursos forestales y servicios ecosistémicos a partir de soluciones basadas en la naturaleza”.
“Buscamos promover al sector forestal como un actor relevante de la estrategia de descarbonización y el desarrollo económico rural, mediante la protección de la biodiversidad, mantenimiento y aumento de la cobertura boscosa, contribuyendo con la mitigación de emisiones de gases de efecto invernadero y protección del recurso hídrico”, añadió.
Rodríguez detalló que los bosques protegidos bajo programas contienen poco más de 136 millones de toneladas de CO2 equivalentes, y que 987.556 toneladas de CO2 equivalentes son mitigadas en contratos vigentes de PSA en las modalidades de reforestación, regeneración y SAF.
Logros. El informe proyecta que este 2021, la institución como miembro de la secretaría técnica que ejecuta acciones REDD+, la culminará un proceso de negociación de dos contratos de compra – venta de reducción de emisiones, que permitirán la atracción de ingresos al país por un monto superior a los $114 millones por medio del Fondo de Carbono y el Fondo Verde del Clima.
De igual manera estas acciones permitieron superar con creces la meta establecida para la institución en el Plan Nacional de Desarrollo vigente lográndose el reconocimiento para pago por resultados de 9.4 millones de toneladas de dióxido de carbono.
Reconocimiento internacional. También se destaca que en 2020 el Programa de PSA recibió un reconocimiento internacional otorgado por la Secretaria de Cambio Climático de la ONU, siendo acreedor al premio en la categoría de financiamiento de inversiones respetuosas con el clima, luego de un exhaustivo análisis por parte de un panel de expertos.
Con este mecanismo se obtuvo como resultado el pago a los productores de 320.114 hectáreas, donde 297.939 corresponden a la modalidad de mantenimiento de cobertura boscosa y 22.174 promueven la recuperación de dicha cobertura, destinándose más de ₡1.590 millones al estímulo de actividades como la reforestación, la regeneración natural y el establecimiento de sistemas agroforestales.
Los territorios indígenas por su parte recibieron un reconocimiento financiero del PSA por 12.564 hectáreas y 250.000 árboles sometidos en el 2020. Para un total desembolsado poco más de ₡4.885 millones.
Por otra parte, iniciativas como los conocidos sistemas mixtos y el programa de plantaciones de aprovechamiento forestal están ganando también poco a poco terreno en su propósito por fortalecer las capacidades locales de los micros productores, por medio de proyectos agroforestales y silvopastoriles (PPAF).
En el primer caso se han financiado 53 nuevos proyectos por casi ₡23 millones y en el PPAF, 54 nuevos proyectos, para un total acumulado de 202.238 árboles sembrados.
Crédito forestal. El programa de crédito forestal brindó oportunidad a los productores de formalizar un total de 129 operaciones de crédito por más de ₡787 millones, principalmente concentrados en los subprogramas de Fomento Productivo e Industria Forestal, que centran su destino a proyectos que utilizan el bosque y los productos que se obtienen de éstos para crear cadenas de valor productivas.
Por otro lado, en cuanto a esfuerzos diversos en la comercialización de servicios ambientales, se sumó la recaudación de $2.9 millones destinados al mayor alcance de los programas sustantivos.
En resumen, el 2020 fue un reto para muchas instituciones del Estado y Fonafifo no es la excepción sin embargo, culmina un periodo con la ejecución presupuestaria institucional del 95% demostrando una vez más el cumplimiento de su mandato legal.
