IMAS ha destinado ¢7.676 millones en subsidios por emergencia COVID-19

  • La mayoría de esos recursos corresponde al subsidio de emergencia, que ha beneficiado a 35.143 personas en condición de pobreza.
  • Por “Orden sanitaria de aislamiento domiciliar” se ha dado protección a 619 familias y por gastos funerarios se ha atendido 45 casos.

Más de 35 mil personas en condición de pobreza han recibido de parte del Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS) el Subsidio de emergencia, como un auxilio económico temporal a las familias para satisfacer sus necesidades básicas frente al impacto provocado por el COVID-19.

Esta inversión social ha representado un total de ¢7.617 millones.

Adicionalmente, a partir de la declaratoria de Estado de Emergencia Nacional, la Mesa de Protección Social implementó desde el mes de agosto dos protocolos diferentes para atender a la población más vulnerables del país frente a la pandemia: uno, correspondiente a “Orden Sanitaria de Aislamiento Domiciliar COVID-19”, y el otro, protocolo de “Gastos Funerarios”.

Este es el detalle de los desembolsos realizados hasta la fecha por la institución:Orden Sanitaria de Aislamiento Domiciliar” (COVID-19). El IMAS ha atendido a 619 personas con una inversión de ¢40.172.299. El subsidio -entre ¢50.000 y ¢70.000- busca garantizar la salud en hogares y comunidades, en el periodo de aislamiento para personas y familias en situación de pobreza o de vulnerabilidad. Se otorga a la principal persona proveedora de ingresos de la familia que tiene aislamiento domiciliar.

Subsidio de Gastos Funerarios. Se han atendido 45 casos en dos escenarios: uno, cuando la persona fallece en domicilio y otra, cuando la persona muere en centro hospitalario. Es destinado a familiares que enfrentan el deceso de un familiar por COVID-19 o un factor asociado a éste y no pueden asumir el costo económico del funeral.

Para recibir este beneficio, se debe seguir el protocolo establecido ya sea para fallecimiento domiciliar o para fallecimiento hospitalario. (Se adjunta infografía).

Para Juan Luis Bermúdez, ministro de Desarrollo Humano e Inclusión Social, “la respuesta del IMAS a esta crisis ha implicado adaptar nuestra gestión a las necesidades emergentes de las familias. Es nuestra obligación, pero también nuestra cultura humanista y solidaria, apoyar a las familias más vulnerables. Ese mandato institucional es el reflejo de un país solidario, que saldrá de esta emergencia sin dejar a nadie atrás”, afirmó.