· Con un avance del 72%, la mayor parte en el lado costarricense, la estructura de 260 metros de longitud entrará en servicio antes de finalizar este semestre.
· Autoridades de obras públicas de Costa Rica y Panamá supervisaron in situ desarrollo del proyecto este jueves y viernes.
· “Prácticamente ya se puede caminar sobre 160 metros de puente, aunque no circular porque aún falta concluir trabajos del lado panameño”, comentó el viceministro del MOPT, Tomás Figueroa.
· Viceministra panameña Librada de Frías destacó la exitosa coordinación entre 25 organismos de ambos países para reubicar las oficinas administrativas y construir paralelamente la nueva infraestructura.
Luego de haber resuelto retos como la movilización de las instituciones fronterizas, el desmontaje del viejo puente ferroviario y la coordinación interinstitucional con más de 25 organismos de ambos países, el puente binacional sobre el río Sixaola registra un avance del 72%.
Así lo constataron este jueves y viernes autoridades de obras públicas de ambos países, encabezadas por la viceministra de Panamá Librada de Frías, y el viceministro de Costa Rica, Tomás Figueroa, quienes se reunieron con la Unidad Técnica Binacional (UTEB), coordinada por la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS), ubicada en Cahuita, Limón.
La construcción comenzó del lado de Costa Rica y finalizará en Panamá, razón por la cual el avance mayor se registra hasta el momento del lado de costarricense. De acuerdo con la planificación, en marzo se hará el lanzado de las vigas en el último vano, con lo cual se finalizaría en junio los 260 metros de puente y un mes después las rampas de aproximación.
“Prácticamente ya se puede caminar sobre 160 metros de puente, aunque no circular evidentemente por estar finalizando la construcción del lado panameño. Respecto a las obras de protección de márgenes el avance es de un 85% del lado de Costa Rica y un 40% del lado panameño”, explicó el viceministro de Infraestructura de Costa Rica (MOPT), Tomás Figueroa.
Un reto principal de una obra binacional como ésta fue armonizar los aspectos legales, institucionales y operaciones con más de 25 organismos de ambas naciones para no interrumpir los servicios que se brindan en los puestos fronterizos.
Sobre este tema la viceministra Librada de Frías, resaltó que “la movilización de los puestos fronterizos del lado de Costa Rica y de Panamá para liberar el área en donde se está construyendo el nuevo puente fue una tarea adicional que se solicitó a UNOPS”.
“En poco menos de un año se logró coordinar a las instituciones, ubicar el nuevo espacio de las oficinas y construir la nueva infraestructura, lográndose un traslado armonioso a las oficinas nuevas en agosto de 2019, con una operación fluida y ambientes más cómodos”, subrayó.
Inversión conjunta
El proyecto cuenta con una inversión de $25 millones, de los cuales $10 millones provienen de una partida no Reembolsable del Fondo de Infraestructura para Países de Mesoamérica y el Caribe (50% para Costa Rica y 50% para Panamá), con una contrapartida adicional de $7,5 millones por país.
El proyecto es gestionado por la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS), y su construcción la realiza el Consorcio Binacional Sixaola, conformado por la empresa Meco S.A. de Costa Rica, Cal & Mayor y Asociados y Mexpresa, ambas mexicanas.
La excelente relación entre Costa Rica y Panamá, así como el apoyo permanente de México resultó fundamental, según comentó Alejandro Rossi, director de UNOPS en Costa Rica.
“La coordinación eficaz con las autoridades del MOP en Panamá y el MOPT en Costa Rica y el respaldo que desde el inicio ha brindado el Gobierno de México, junto a todas las entidades fronterizas, ha permitido no solamente una gestión orientada a resultados en materia de infraestructura sino también atender al interés genuino de las comunidades locales a ambos lados de la frontera, en el marco del enfoque de proyectos de infraestructura de nueva generación”.
Mencionó -entre otros ejemplos- el apoyo consensuado a las mujeres de la etnia Ngobe que desarrollaban sus costumbres de lavado debajo del puente ferrocarrilero, construyendo un nuevo y mejor sitio más cerca de sus viviendas y en la parte laboral, la contratación equitativa de operarios panameños y costarricenses.
En ejecución
A la fecha se han construido 36 de los 40 pilotes preexcavados de concreto reforzado que darán soporte al puente nuevo de 260 metros de longitud y 16,4 metros de ancho, a dos carriles, que incluye aceras, ciclovías, espaldones y rampas de acceso.
La losa estructural tiene un avance del 60% y ya se instalaron 15 vigas principales de las 25 en total que tendrá el puente, de 52 metros de longitud y 108 toneladas cada una.
Actualmente, los equipos de trabajo están concentrados en definir los detalles de terminación del nuevo puente con los extremos a ambos lados de la frontera y los parques que beneficiarán a las comunidades locales.