Tachia blancoi es el nombre con el que los biólogos del Museo Nacional de Costa Rica (MNCR), Alexander Rodríguez y Joaquín Sánchez, denominaron a una especie nueva de planta, endémica de la Isla del Coco y descubierta hasta ahora en el mundo.
“Se trata de un pequeño arbusto de aproximadamente un metro de altura con flores blancas, ramas recubiertas de un tipo de resina, muy característico de la familia botánica Gentianaceae, a la cual pertenece esta nueva especie”, explicó Sánchez.
En el mundo existe referencia de un género de plantas denominada como Tachia, originario de Suramérica y no había sido descrito en otro país hasta que en 1997, científicos costarricenses lograron identificar en la zona de Tarrazú un ejemplar de la especie conocida como Tachia parviflora, descrita antes por Maguire y Weaver.
En 1994, funcionarios de la Isla del Coco habían encontrado otro espécimen que fácilmente Sánchez identificó como de la familia de lasGentianaceae, a la cual pertenece el géneroTachia, el problema fue que el ejemplar era estéril (sin flores ni frutos), por lo que su identificación y descripción era imposible en ese momento, según informó el MNCR.
“Encontrar la planta completa para investigarla se convirtió en un reto para los biólogos. Varias expediciones en años siguientes no dieron resultados positivos hasta que, a finales del 2016, cerca del Cerro Iglesias y el Cabo Dampier de la Isla del Coco, Rodríguez junto al funcionario del Sistema Nacional de Áreas de Conservación, Guillermo Blanco, divisaron el arbusto que después denominarían como Tachia blancoi. Esta se convierte en la segunda especie de Tachia existente en Costa Rica”, comunicó el MNCR.
A partir de este momento inicia un proceso científico para validar el posible hallazgo. Sánchez explicó que reconocer una planta con potencial de ser nueva para la ciencia, pasa mucho por la experiencia del investigador. En este caso fue Rodríguez, quien al divisarla supo que era la que estaba buscando.
“Una vez reconocida, se toman muestras como ramas, flores y frutos, así como muchas fotografías, a estos le llamamos especímenes botánicos, los cuales se llevan al laboratorio donde se secan y luego se llevan al herbario”, explicó el biólogo.
El MNCR explicó que el proceso de investigación pasa por la literatura existente, cuando un biólogo descubre lo que cree es una nueva planta, busca meticulosamente en toda la bibliografía científica a su alcance, compara todas sus partes con otras descritas por científicos alrededor del mundo y de esta forma determina que no había sido descrita antes. Para darle validez, escribe un artículo científico en una reconocida revista internacional y de esta forma queda validada como una nueva especie.
El paso a seguir será la catalogación de la planta como parte de la colección de, especies tipo del Herbario Nacional donde quedará disponible como testigo de su inclusión como especie nueva en el ámbito de las ciencias Botánicas.
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